viernes, 9 de noviembre de 2012

Análisis


Cada día las calles se llenan de personas, de transeúntes y vehículos que imposibilitan el buen, puntual y normal traslado hacia nuestros diferentes destinos, lo que provoca accidentes, robos, complicaciones e incomodidades, todos quisiéramos una ciudad mucho más limpia, visualmente, algo que en muchas ocasiones no es posible por la gran congestión de venteros ambulantes que se acumulan en cada rincón; el sofoco, el calor y la inseguridad pueden ser factores comunes que se dan gracias a ellos. 
Aun así los venteros ambulantes en este caso los fruteros tienen la difícil capacidad y obligación (más que responsabilidad) de acomodarse a la economía del país, ya que se ven obligados a que sus vidas dependen de esto, y aunque a veces pueden ser una molestia por lo antes mencionado, es más que necesario destacar la fortaleza que se necesita para trabajar de sol a sol buscando una estabilidad económica; cosa que los impulsa a ser creativos en la forma de vender sus productos, a ser capaces de ofrecer a todo tipo de público y dejar a un cliente totalmente satisfecho, ahora dejando un poco de lado el producto en sí (las frutas), podríamos afirmar de igual manera que ellos venden sonrisas, alegrías y momentos especiales. 
Los vendedores de fruta son muy importantes ya que no todas las personas compran en locales privados, hay un gran nicho de personas que compran a vendedores informales en el transcurso del día ya que lo recomendado es comer 5 frutas al día. Gracias a los vendedores de fruta ambulantes se puede satisfacer mucho mejor esta demanda y de una manera muy sencilla entendiéndose directamente con el vendedor, convirtiendo la compra en un espacio de armonía y más humanizado.
Muchos de los vendedores de fruta son de origen campesino ya que la agricultura está arraigada en nuestras raíces, trasladándose hasta lo rural en donde se acomoda de una manera más citadina lo que genera esta relación que hace que la gente compre a estos vendedores la clave es la cercanía y la asesoría hacia los clientes de una manera muy familiar a diferencia de las grandes plazas privadas.

Perfil Wilson



Wilson es una persona de unos 34 años es un señor muy amable y con una gran calidez humana, nos podemos dar cuenta por sus respuestas que no tiene un lenguaje amplio y sus respuestas están limitadas casi todas ha si o no sin dar muchos detalles lo que nos hace pensar que es una persona mas bien reservada quizás por su recorrido y algunos trajines que ha pasado en su vida, este encaja con el oficio de vendedor de frutas por que es una persona trabajadora y se tiene que seguir preocupando por su sustento diario.
Es muy poco alegre, pero trata de ser muy amable.


Perfil Edgar Antonio


Entrevista # 2


Desde muy joven supo lo que era enfrentar el mundo y empezar a trabajar para salir adelante con su madre y sus hermanos, hoy hecho todo un hombre reconocer lo duro que fue dejar todo para llevar la comida a su casa. El único lugar en donde encontró su espacio para comenzar con sus labores fue en la venta informal de frutas.
Es una persona echada para adelante y que se le nota en su cara que trata de sacarle a todo lo que hace, lo que le pasa, una chispa de alegría para sacarle provecho a esta vida que tiene. Es decidido y muy amable con las personas que pasan por allí, siempre tiene esa sonrisa que lo caracteriza y que por eso se ve reflejado que las ventas aumenten considerablemente.
El a pesar de todo se queja mucho a veces por las situaciones que ha tenido que pasar con el espacio público y las re-ubicaciones que les han hecho para poder estar en este momento tan organizados.
Es muy gracioso, hace reír a todos sus compañeros cercanos que tienen otros puestos de ventas, ya sea de frutas o verduras. Siempre trata de hacer pasar un rato mas agradable con sus comentarios.

Perfil Alejandro



Entrevista # 3

Alejandro es un hombre joven que lleva 12 años trabajando en la venta de frutas. Es un ser humano muy tranquilo y formal. Él ha podido acceder a un poco mas de estudios que el resto de los entrevistados, cuando estaba adolescente trabajaba vendiendo frutas y además estudiaba en el colegio. Aunque muy tímido es un gran vendedor que saca una parte extrovertida de su ser para mostrar amabilidad y seguridad con los productos que ofrece a sus clientes, quienes a veces a pesar de ser complicados se van mas tranquilos porque Alejandro trata de venderles las mejores frutas y con una excelente atención.
Aunque lleva mucho tiempo trabajando en este tipo de oficio, piensa que quizás en algún momento sea bueno cambiar de profesión , lo que nos hace pensar que es una persona con ilusiones y expectativas con su futuro y que tal vez, aunque disfrute por el momento de las ventas, luego este esperando poder dar el paso para algo mas grande, una empresa, por ejemplo.



Perfil María Eugenia




Entrevista # 4

María Eugenia, con mucha pena decidió hacer la entrevista.
Es una mujer bastante alegre, a pesar de los inconvenientes y dificultades que ha tenido en su vida, además es una persona que no ha tenido la oportunidad de estudiar en el colegio, desde muy joven está trabajando. Ella esta ubicada en el mercado Tejelo (centro de la ciudad de Medellín) y lleva allí 14 años trabajando, ahora es una mujer de 33 años que sólo ha hecho esto toda su vida: vender frutas en el centro de la ciudad. Es muy alegre y conversadora, está orgullosa de su trabajo porque con eso puede darles la comida a sus dos hijos, por lo tanto no cambiaría su profesión por nada.
Ella aunque alegre, por momentos es un poco tímida y pues se le nota en su cuerpo que ha tenido que trabajar mucho y muy duro para mantener a sus niños. Es "amiguera", pues en los puestos alrededor del suyo ella conversaba con sus compañeras y compañeros de oficio en todo momento siempre y cuando no estuviese atendiendo sus clientes, pues, para esta mujer son su mayor motivación para continuar desempeñándose en esta labor.
Ella nos confesó que lo que mas la motiva a vender frutas es la atención al cliente pues esa amabilidad que la caracteriza la puede trasmitir cuando tiene que atender a alguien, también en momentos en los cuales los clientes no son tan respetuosos o amables con ella, tiene que hacer su mayor esfuerzo y trasmitirles su energía y alegría.

Entrevista # 1


Entrevista Wilson

Andres: Hace cuanto se dedica a esto?
Wilson: desde enero estamos acá.
Andres: Alguien lo incentivo para que trabajara en esto?
Wilson: fue por un primo mío.
Andres: Que es lo más agradable de esta actividad?
Wilson: trabajar me gusta trabajar con la fruta es bueno
Andres: Nos podría contar alguna anécdota relacionada con su trabajo?
Wilson: no por el momento no, todo ha estado bien.
Andres: Ha tenido dificultades con las autoridades?
Wilson: no.
Andres: Como se ha trasformado el sitio en los últimos meses?
Wilson: ha mejorado mucho el ambiente, todo más bien ubicado.
Andres: Cree que cualquier persona puede dedicarse a este oficio de la venta de frutas.
Wilson: mientras tenga el puesto sí.
Andres: Le gustaría cambiar de oficio diga cuál?
Wilson: por el momento la verdad no.
Andres: Que características tienen las personas que le compran?
Wilson: no, son personas bien piden aseo.
Andres:Que cree que pasaría si en el centro no hubieran ventas de fruta?
Wilson: pues por uno que hubiera pero es el empleo de mucha gente y todos necesitamos llevar el diario a la casa

Por: Andres López

Entrevista # 2


Entrevista  Edgar Antonio Benítez Vargas
Sara: ¿Desde cuando estas ejerciendo en este oficio?
Edgar: -Hace 17 años.
Sara: ¿Quién la introdujo a esta actividad?
Edgar: -Si, un amigo me metió a trabajar cuando yo era un niño, tenia 13 años.
Sara: ¿Qué es lo mas agradable o desagradable de este trabajo?
Edgar: -Lo que mas me agrada es que trabajo de cuenta mía, cuando necesito hacer alguna vuelta salgo y la hago, en cambio en otra parte me tocaría pedirle permiso a los jefes. Desagradable no nada, todo me ha parecido bien.
Sara: ¿Podría contar cuales son las anécdotas que mas recuerda en este trabajo?
Edgar: -No, el único problema que hemos tenido acá es cuando nos van a sacar cuando nos van a renovar el bazar, como por decir nos sacaron en enero y estuvimos cinco meses mientras nos cambiaban los toldos de madera, y que allá las ventas se nos caían mucho y las ventas nos salían por ahí por mitad, ya solo eso que nos han sacado en dos veces para renovarnos el bazar, es lo único.
Sara: ¿Has tenido problemas con las autoridades?
Edgar: -Anteriormente si porque cunado estábamos recién llegados porque espacio publico nos molestaba mucho porque hay veces sin permiso, pero después ya nos censaron y nos ubicaron a cada uno en su puesto.
Sara: ¿Cuantos años lleva en este lugar?
Edgar: -17 años
Sara: ¿Cómo se ha transformado este lugar los últimos años?
Edgar: -Anteriormente aquí las ventas eran muy buenas, lo que pasa es que usted sabe que ahora por el desempleo ahora las ventas si se caen un poquito, pero de todas maneras esta cuadra ha sido muy buena, esto aquí mucha gente y ahora que nos hicieron estos módulos de acero inoxidable que quedo mas espacio para que la gente circule, esto ha estado bien.
Sara: ¿Cree que cualquier persona puede dedicarse a este trabajo?
Edgar: -Si, todo es experiencia, llegar y trabajar bien, vender calidad y atender bien a la gente. La atención al cliente es muy importante.
Sara: ¿Le gustaría cambiar de oficio?
Edgar: -No en el momento no, yo todavía la vida he trabajado en esto y aca estoy bien.
Sara: ¿Qué características tiene su clientela?
Edgar: -Aquí llegan de toda clase, llegan clientes buenos, llegan regulares muy mala clase diciendo ¿Qué porque tan malos los productos?, ¿Por qué esto es tan feo? Asi, pero no uno tiene que saber manejar eso
Sara: ¿Cómo la trata su clientela?
Edgar: -Muy bien.
Sara: ¿Qué cree usted que pasaría si no hubiera ventas ambulantes de frutas en el centro?
Edgar: -Eso se necesita, porque ya le tocaría ir a la gente ir al ÉXITO, y no generaría tanto empleo. Entonces a la gente le tocaría ir al ÉXITO y usted sabe que allá es mas caro, allá le cobran la entrada, nosotros podemos vender mas barato porque nosotros pagar mas poquitos impuestos que ellos.

Por: Sara Gómez

Entrevista # 3


Entrevistado Alejandro
Jorge: ¿Hombre hace cuanto se dedica a esto?
Alejandro: ¿A este trabajo? Hace doce años
Jorge: ¿Alguien lo introdujo a esta actividad?
Alejandro: No, yo mismo me puse acá a trabajar
Jorge: ¿Que es lo mas agradable y desagradable de la actividad?
Alejandro: Agradable… pues puede ver uno a varias personas que pasan por acá, y desagradable cuando vienen a entregarle a uno la mercancía y se la mallagan.
Jorge: Hombre cuéntenos una anécdota que recuerde relacionada con este trabajo.
Alejandro: Las anécdotas que hallamos tenido… sobre el espacio público. Con el espacio público que si nos ha atropellado mucho, y esa es la única anécdota que hemos tenido. Por ejemplo este pedazo aquí a quién le incomoda? A nadie, por acá nadie pasa.
Jorge: ¿Ha tenido dificultades con las autoridades por las razones de esta actividad?
Alejandro: Sí, he tenido varios alegatos.
Jorge: ¿Cómo se ha trasformado este sitio a lo largo de los últimos años?
Alejandro: Se ha trasformado mucho, mucha seguridad y muy bueno esto por acá ya, mucha confianza.
Jorge: ¿Cuántos años lleva aquí? ¿Doce, cierto?
Alejandro: Doce años.
Jorge: ¿Cree que cualquier persona puede dedicarse a vender frutas aquí en este sitio o en Medellín?
Alejandro: El que sea capacitado sí, el único requisito es que sea buen vendedor.
Jorge: ¿Le gustaría cambiar de oficio? ¿A cuál, de pronto?
Alejandro: Sí, si cambiar de oficio sí, pero en algo que sea mas interesante, que le haga a uno que le de buenos productos  de forma de vivir -¿Qué?- A ver que le dijera a usted, una empresa, pero que sea una empresa buena, no cualesquier tampoco.
Jorge: ¿Qué características tienen los clientes con los que trata a diario? ¿Son difíciles de tratar?
Alejandro: No, no, son buenos , son amables. Son con buen genio.
Jorge: ¿Hombre que cree usted que pasaría sí no hubiera ventas de frutas por acá por este sector del centro?
Alejandro: Ah no, esto fuera nada, todo en la plaza no más? No hay que rebuscar la platica
Jorge: Bueno gracias por todo.


Por: Jorge Muñoz

Entrevista # 4


Entrevista  María Eugenia Álvarez
Laura: Desde cuando estas ejerciendo en este oficio?
María: -Hace 14 años
Laura: ¿Quién la introdujo a esta actividad?
María: -Pues que yo viniera acá mmm, el señor que esta ahí (Don Rafael)
Laura: ¿Qué es lo mas agradable o desagradable de este trabajo?
María: -Lo agradable es atender la gente, como hay gente desagradable que hay veces es muy cansona, que vea que cámbieme esto que no me gusto, es lo mas desagradable.
Laura: ¿Podría contar cuales son las anécdotas que mas recuerda en este trabajo?
María: -Problemas con espacio público. Si tuvimos peleas acá, muchos problemas
Laura: ¿Has tenido problemas con las autoridades?
María: -Si, con espacio publico.
Laura: ¿Cuantos años lleva en este lugar?
María: -14 años
Laura: ¿Cómo se ha transformado este lugar los últimos años?
María: -lo normal siempre vienen y me buscan los mismos, si prácticamente tengo la clientela
Laura: ¿Cree que cualquier persona puede dedicarse a este trabajo?
María: -Claro que si, uno se sostiene, se consigue la comida, el arriendo, los servicios, todo.
Laura: ¿Le gustaría cambiar de oficio?
María: -No, ahí estoy levantando a mis hijos con este oficio, y no me gustaría. Mi hija ya tiene 12 años y el niño tiene 13.
Laura: ¿Qué características tiene su clientela?
María: -Vienen parejas, marido y mujer.
Laura: ¿Cómo la trata su clientela?
María: -Bien, toda mi clientela me trata muy bien.
Laura: ¿Qué cree usted que pasaría si no hubiera ventas ambulantes de frutas en el centro?
María: -Hay por Dios, la leche de mis hijos se pierde, eso pasaría. Si porque yo no se sino hace esto, yo hace poco me fui a trabajar en una marquetería y no fui capaz, pues para mi es todo. Eso pasaría, hasta mis hijos estarían aguantando hambre.

Por: Laura Bedoya